Enfoque especial: La tetania hipomagnesémica
¿Qué es la tetania hipomagnesémica?
La tetania hipomagnesémica es un desorden metabólico de los rumiantes, que ocurre principalmente en sistemas ganaderos a pastoreo. La causa está asociada a bajos niveles de magnesio (Mg) en la sangre (hipomagnesemia) de estos animales producto de su falta en la dieta a consecuencia del pastoreo de gramíneas anuales como ballicas o perennes de crecimiento otoño invernal pastoreados hacia el final del invierno y comienzo de la primavera. Cuando un grupo de vacas presenta hipomagnesemia, genera un cuadro con sintomatología que asusta al agricultor, ya que por lo general afecta entre un 5 y 20% de los animales, donde se observan signos clínicos de agresividad, marcha tambaleante, temblor muscular, convulsión, y si estos no son tratados correctamente, terminan muriendo.
¿Cuáles son los animales más susceptibles?
Las vacas mayores y/o lactantes tienen mayor riesgo que las vacas jóvenes, ya que la capacidad de movilización de sus reservas de Mg es muy baja o nula y la reserva de este mineral en el organismo es escasa (3 a 8 días), por lo tanto, dependen de la ingesta diaria. En general, los animales que más frecuentemente se ven afectados son los que están en mejor estado corporal, ya que la movilización de grasa provoca una captura de Mg y por consiguiente una disminución del Mg en la sangre.
¿Cuáles son los factores que favorecen la aparición de la hipomagnesemia?
La época donde ocurren más casos agudos es a fines de invierno-principios de primavera, coincidiendo con una alta tasa de crecimiento del pasto. Este contiene una alta proporción de agua y al ser consumido por el animal, la absorción de Mg disminuye por una mayor tasa de pasaje (diarreas por verdeos). Además, en estos pastos hay deficiencia de energía, y como la absorción de Mg en el rumen es de tipo activa (o sea requiere energía), se absorbe menos. Asimismo, esta etapa de crecimiento de pasto coincide con el estado fisiológico de las vacas en donde los requerimientos aumentan debido a un flujo del mismo hacia la leche (fin de gestación-principio de la lactancia). La composición de la pastura también tiene importancia: las gramíneas tienen una menor concentración de Mg y Ca que las leguminosas. También el incremento de potasio estacional y el exceso de fertilización nitrogenada pueden contribuir a la ocurrencia de hipomagnesemia.
¿Cómo puedo prevenir la tetania hipomagnesémica?
Afortunadamente, la hipomagnesemia es prevenible y usted puede implementar estrategias para ayudar a controlar su riesgo. Una de ellas es la suplementación con sales minerales que contengan Mg en forma reforzada como en el producto MiproMast Crianza Mg+, especialmente formulado para vacas crianceras durante épocas con pasturas tiernas desbalanceadas. Esta suplementación se debería comenzar a realizar un mes antes de que los animales se expongan por primera vez al momento de mayor riesgo y se debería continuar durante 60 a 90 días después del primer signo de crecimiento de la pradera. Además, se recomienda administrar una fuente energética para mejorar la absorción de este mineral. Otras estrategias son evitar que los animales lleguen al parto con exceso de peso y evitar situaciones de estrés y encierres prolongados. Asimismo, se recomienda hacer pastorear vacas jóvenes menos susceptibles en las pasturas de mayor riesgo y mantener a las vacas lactantes mayores fuera del pasto hasta que las gramíneas midan de 10 a 15 cm. Cuando los animales presentan los signos de tetania hipomagnesémica, puede ser demasiado tarde para salvarlos. Por eso la prevención es la mejor estrategia.
¿Qué tratamiento puedo realizar?
En el caso de necesitar tratamiento para aplicar a un animal caído con síntomas de hipomagnesemia, consulte a su Médico Veterinario. En estos casos se recurre a una fuente de Mg inyectable, teniendo en cuenta que sólo elevará el Mg en sangre durante 24-48 hrs, por lo que inmediatamente se deberá asegurar un nuevo aporte de Mg por vía oral. También es necesario suministrar una fuente de energía (p.e. concentrado de maíz), precursores de la gluconeogénesis (p.e. propilenglicol) o glucosa por vía parenteral, para favorecer la absorción de Mg. También se debe mantener al animal hidratado y si las condiciones climáticas son adversas, protegerlo de las mismas.
Angélica Baumert
Médico Veterinario y Representante de Ventas Técnico Comercial de SANO